lunes, 20 de junio de 2011

Bailamos

    ¿Bailamos? La cena ha sido adecuada, el Malbec acompañando cordialmente el combate de miradas y palabras que hemos sostenido en las últimas horas de este día que comienza a despedirse.
No es necesario decir nada.
Mis gestos,
mi sonrisa,
el subrepticio paso de mi lengua por mis labios,
tus ojos,
el roce de tu mano sosteniendo apenas un momento más de lo necesario la mía al encender mi cigarrillo; todo es una silenciosa coreografía, precisa, exacta.Cautivadora.
      Bailamos. Tu cuerpo se acerca al mío, tus manos en mi talle, mis brazos rodean tu nuca.Murmuras naderías a mi oído, los inteligentes discursos y las palabras pomposas quedaron atrás, ya no hay que seducir ni demostrar ingenio, sólo dejarse llevar por el ritmo lento y abrasador (chega de saudade) dejarse llevar y apenas moverse, los pies desplazándose sólo un milímetro, el abrazo cada vez mas consciente de su ilícita  voluptuosidad, nadie nos ve, me estrechas contra tu cuerpo apoyo mis labios en el hueco de tu garganta, tu mano aturde mi cuerpo contra tu cuerpo,contra tu sexo prisionero, mi abrazo se ciñe más, te ciñe a mí.Subes tu mano por mi costado y me acaricias, mi cuerpo reacciona a tu contacto, a tu pulgar inquisidor. Nos movemos apenas, enlazándonos, apremiándonos, el uno con/contra  el otro, preludio al beso que por esperado y deseado va a ser simplemente indeleble.

viernes, 10 de junio de 2011

Cuentas

    Amo la manera en que desgranas tus palabras: una a una se van deslizando entre tus labios, sutiles a veces, otras con la fuerza desgarradora de tus manos en mi espalda. Tus palabras me deshacen y me acarician, me crean, me cambian, me elevan y me desconciertan. Yo las bebo directamente de tus labios, acaballada en tu cintura, tus dedos rozando la mía. Me vas arrullando con tus palabras y yo voy adentrándome en tu laberinto.

    Me hablas y yo siento que soy otra, la que creaste e imaginas a tu lado, la que cruzaría océanos para verte. En tu boca soy bella y simple, sin reclamos ni lamentos, con todo el tiempo para vos. Y yo me complazco en esa mentira, escondo el ovillo que me marca el camino lejos de vos y te sigo prometiendo que esta vez va a ser para siempre.

domingo, 5 de junio de 2011

Espejismos

    Dulces sueños, amor mío. Has bebido del cántaro de mi ombligo y ahora duermes plácido junto a mí. Duermes mientras te acuno y te canto la nana de mis pechos pequeños, de estas caderas hechas para tus manos, del claro vello que cubre mis muslos. Y mientras te vas hundiendo más y más en la oscuridad, las líneas de tu frente, todavía salpicada por el deseo, se disipan y se van junto a las preocupaciones y el cansancio de la semana; tu aliento se hace pesado y profundo, tus latidos casi imperceptibles. Yo te contemplo por un rato (you're the sunshine of my life) y me levanto silenciosa, y escribo sólo para vos.

viernes, 3 de junio de 2011

Adjetivos. 2. Voraz

     La paciencia y la mesura nunca fueron realmente lo mío; eso de elegir concienzuda y meticulosamente, digamos, un durazno, sopesarlo admirando su color y adivinando su dulzura, y llevarlo a la boca con elegancia no es para mí.  Sí el hincar los dientes, desgarrar la carne y dejar que corran por mi barbilla y hasta el suelo las doradas gotas de jugo. Tampoco soy moderada al momento de disfrutar de un libro, una película; me zambullo en ellos y los devoro sin sosiego, alentada hasta el final por el simple placer de dejarme llevar hacia la emoción que me presentan.Un cigarrillo entre mis dedos nunca tendrá la oportunidad de consumirse ociosamente; una, dos aspiraciones profundas y ya está, junto a la tercera exhalación cae la colilla, agotada, vacía, ardiente.

    Exceso, gula, atracón. Todo eso soy yo, que te acorralo y te engullo, te enciendo, te fumo, te bebo (hasta el fin) te leo, te toco, te tomo y te amo con la misma pasión. Voraz, me alimento de vos, y ya ahíta me alejo con esa sonrisita infame en los labios, hasta más ver, baby.